La barrera infrarroja para detección de humo consiste en un dispositivo que, de forma continuada, lanza un haz infrarrojo, el objetivo del cual es detectar lo antes posible la presencia de humo en un espacio concreto. Cuando la señal sobrepasa la intensidad de aquella que hemos fijado en el aparato, activará una alarma para avisarnos del posible peligro.
Las barreras infrarrojas de detección de humos superan algunas de las limitaciones que podríamos encontrar en otros detectores de humos, y son de una gran importancia para la prevención y extinción de incendios.
Una barrera infrarroja de detección de humos consta de 3 elementos:
El Transmisor
Este elemento es el que genera y proyecta el haz de luz infrarroja, que es invisible. Dicha luz es proyectada sobre una zona en la que deberá estar situado el segundo de los elementos que forman parte de la barrera infrarroja, el Receptor.
El Receptor
Se trata de un sensor fotosensible, cuyo cometido es enviar la señal de alarma al último de los elementos que componen la barrera infrarroja, la Unidad de Control.
La Unidad de Control
Su misión es la de analizar la información de la señal que le manda el receptor, así como de comunicar el estado del equipo a la Central de Incendios. Esta Unidad de Control, según sea el detector, puede estar integrada o separada.
Podemos hablar de dos tipos principales de barreras infrarrojas para la detección de humos:
En este tipo de barrera infrarroja el Transmisor y el Receptor se instalan por separado, debiendo existir entre ellos una separación comprendida entre los 10 y los 100 metros. Además, el receptor va conectado a la unidad de control, la cual se instala a nivel de tierra.
En este caso el transmisor y el receptor forman, a diferencia del detector por proyección, una sola unidad, conocida con el nombre de Transceptor.
La luz infrarroja que transmite en este tipo de barrera infrarroja el equipo, se refleja a través de un prisma. En este caso las distancias entre el receptor y la unidad están comprendidas entre los 5 y los 100 metros.
En cuanto al funcionamiento de la barrera infrarroja de humo, podemos decir que sigue los principios de oscurecimiento de la luz.
Las barreras de rayos infrarrojos son un sistema de detección muy fiable, tanto en interiores como en exteriores.
En Extintores Presman, somos una empresa especialista en instalación de barreras infrarrojas para detección de humo, contando con más de 20 años de experiencia y una plantilla de profesionales que estudiarán tu caso en concreto y propondrán la solución más adecuada para cada circunstancia.
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